Escúchenlo cabrones
La comedia profana
!Escúchenlo! !Cabrones.!
Escúchenlo. Cabrones. No crean ni por nada ni por nadie que habrán de matarme. No, las aceitunas del vinagre. No, los postrecillos de la más amarga esperanza. Cuando después de todo es demasiado tarde. ¿Qué es el hambre? El hambre que me devora. El hambre. No, no les diré a las aceitunas. No, no les diré a los vinagres de las ensaladas. No, no les dire a los bosques de espesuras. No soy vegetariano. No, no a las legumbres. No, no a los gigantes verdes. No, no a los licores de la ensoñación. Y a los postrecillos del sentirme bien. Y a la barriga inflada. Ya conozco bien el cuento. Ya sé de qué se trata. Conozco de memoria todo su argumento. Y por todo el oro del mundo juro que No, que No, y que No. No, no, no, me podré quedar sentado y al cabo sentirme lleno o colmado cuando la misma mierda de siempre se repite. Y los aperitivos y los postres me dan asco. Asqueado me despido. Asqueado. Y no me resigno. Ni renuncio. No, y no, y no…
La comedia profana de Giannina Braschi

Especial para El Mundo. Domingo 28 de diciembre de 1986.
Giannina Braschi, “La comedia profana”; Barcelona, Anthropos editorial del hombre, Ambitos Literarios, Poesía 79; 1885, 194 p.
La Comedia Profana, libro original, exasperante caótico y satisfactorio, todo a la vez, es el segundo poemario de Giannina Braschi, el cual la autora, utilizando las dos convenciones literarias de la vida como escenario y la vida como manuscrito, aporta un texto que se vive a la par que se escribe y se representa.
Importa saber cómo describe un autor su obra, aunque no se le tome al pie de la letra, y Braschi, tal vez con una buena dosis de ironía en su autocontemplación, describe así este poemario (que, por cierto, se redacta como si fuera prosa) en su advertencia:
“Fue escrito para el mundo y para la vida y para las muchedumbres y las masas. Y fue escrito para las élites y los pensadores y los filósofos. Es el libro de las exclamaciones y las interjecciones. Y es el libro de Baco y Fausto. Y del poeta niño. Y del poeta actor. Y del poeta filósofo…”. (Click to full review…)
La comedia profana (1985)
Escúchenlo. Cabrones. No crean ni por nada ni por nadie que habrán de matarme. No, las aceitunas del vinagre. No, los postrecillos de la más amarga esperanza…
